El aumento era necesario. Pero para evitar que se esfume, debe complementarse con la prescripción de medicinas genéricas de calidad y bajo costo, con una mayor cobertura para la tercera edad y los pacientes crónicos, y con la regulación de los precios de los medicamentos con igual principio activo

El aumento de la cobertura de los medicamentos ambulatorios es un paso de avance ya que responde a los reclamos de millones de afiliados, angustiados ante el alza creciente del precio de las medicinas. Tenemos la mala reputación de ser uno de los países de la región donde los precios son más elevados.

Sin dudas, el aumento de un 50% del límite del consumo pagado por el Seguro Familiar de Salud (SFS) constituye un gran alivio para los pacientes, quienes desde hace años reclaman la intervención de las autoridades ante las frecuentes y furtivas alzas de todos los fármacos.

Señalan con razón, que para cientos de miles de pacientes el límite anual de 8,000.00 apenas les cubría las necesidades de medio año. El aumento a 12,000.00 es una respuesta que mejora la situación, pero todavía, sin resolver el problema de fondo. Este aumento, por sí solo, deja abierta la posibilidad de que pronto se esfumen con nuevas alzas.

La política sobre los medicamentos ambulatorios es uno de los mayores retos del Ministerio de Salud Pública, y su cobertura suficiente, un dolor de cabeza para el Consejo Nacional de Seguridad Social (CNSS). Suconsumo constituye una condición sine qua non para recuperar la salud y el bienestar, extender los años de vida saludables, e incluso, para preservar la propia existencia. Aun así, se trata como una mercancía cualquiera.

La demanda de medicamentos ambulatorios representa el 68% del gasto familiar de bolsillo, de acuerdo con el Banco Central. Dado que el gasto familiar de bolsillo equivale al 45% del gasto nacional en salud, las compras de medicinas oscilan alrededor del 30% del gasto nacional en salud, erosionando el presupuesto familiar. En Colombia, con una cobertura del 98%, el gasto de bolsillo es solo el 14%.  

Este excesivo gasto familiar de bolsillo, en gran medida ocasionado por el alto costo de los medicamentos y su falta de regulación, constituye la mayor barrera al acceso universal al cuidado de la salud, contraviniendo uno de los principios y de los objetivos esenciales del Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS).

Hacia una solución integral y definitiva de los medicamentos

La Fundación Seguridad Social para todos (FSSPT) reitera que la Resolución del CNSS es insuficiente. Y somete a la consideración de los afiliados, de las autoridades y de la opinión pública, una propuesta de política nacional de medicamentos inclusiva y solidaria, basada en las siguientes normas esenciales:  

1. Prescripción obligatoria de todos los medicamentos, basada en la bioequivalencia del principio activo, es decir, en medicinas genéricas de calidad reconocidas por el Ministerio de Salud Pública
2. Revisión y actualización del Catálogo de Medicamentos de la Seguridad Social, con medicinas genéricas de calidad, aprobadas por el Ministerio de Salud Pública
3. Elevación a 14,000.00 pesos el límite anual de los medicamentos ambulatorios para todos los afiliados con 60 años o más
4. Elevación a 14,000.00 pesos el límite anual de los medicamentos ambulatorios a los afiliados con tratamientos especiales, independientemente de la edad y debidamente certificados 
5. Elevación a 12,000.00 el límite anual de los medicamentos ambulatorios a todos los afiliados menores de 60 años, excepto a los pacientes bajo tratamientos especiales debidamente certificados
6. Regulación del Ministerio de Salud Pública de los precios de los medicamentos genéricos, dejando libre la fijación de los precios de las medicinas patentadas
7. Libre elección de los medicamentos genéricos disponibles, pagando el 30% del costo y la ARS el 70% restante, como señala el Art. 130 de la Ley 87-01
8. Opción de los afiliados a medicamentos patentados, cubriendo el 100% del costo adicional del genérico incluido en el Catálogo de Medicamentos del PBS
9. Campaña de SISALRIL, la DIDA y el MISPAS de información y orientación a la población sobre el consumo de los medicamentos basados en el principio activo.

La adopción de estas recomendaciones y de cualquiera otra que las complemente reduciría en un 50% el gasto familiar de bolsillo, sin lugar a duda, un salto cualitativo hacia un sistema de Seguridad Social más universal, solidario, eficiente, eficaz, sostenible y satisfactorio. FELICES FIESTAS Y MAYOR SEGURIDAD SOCIAL PARA TODOS EN EL 2024.  ADS/517/21/12/2023.